Δεν όνομα

Mis ojos se aterraron al verte desde afuera,
Mis manos ensangrentadas gritaban tu nombre, lo gritaban
Fuerte llore, días, noches, meses y otros días más
Oh ternura cuanta falta nos haces

En tu figura yo rondaba, hacía meses…
Hoy el amor ha muerto, su solsticio menguó el final
Manejó mi destino, mí tiempo y gritó tanto que quedó sordo

Hoy ya ninguna voz habla, mi esperanza esta molida como el polvo
Mis ojos son agujeros desbordados de morbosidad
Tengo pena del día, del sol que ilumina y la noche que engatusa
Me siento un fantasma deambulando en tu silueta
Mi lienzo esta parado, sin color, sin cariño, sin carisias
Sin pinceles que protesten por la prisa que ha ganado,
Por vomitar aunque sea un poco, la sonrisa eterna de mi renacer

Miro en el espacio mas intimo de tus rodillas,
Las heridas de tanta rabia suelta,
De tanto caballo desbordado,
De tanta pena, amargura y desaliento…

Y repito a ti viento, maldito brujo de aquel día
Hoy ninguna voz habla, ningún ser es eterno
Porque en mi la pena se ha comido hasta los muertos.